El Ghee es el aceite obtenido del proceso de clarificación de la manteca, es una receta milenaria muy utilizada por la medicina tradicional ayurvédica con propiedades culinarias y terapéuticas.
Natural, artesanal y puro.
Ideal para cocinar, untar o aderezar / No contiene conservantes ni agregados de ningún tipo / No necesita refrigerador.
El ghee es un potenciador de la salúd, una fuente saludable de grasa que ofrece beneficios para cocinar y es bueno para la mente y el espíritu.
Está hecho a partir de manteca, pero en su elaboración se transforma en aceite, ya que se eliminan los sólidos y las impurezas por lo que la mayoría de las personas que son intolerantes a la lactosa o a la caseína no tienen problemas con su consumo.
Es nutricionalmente superior a otros aceites / grasas debido a su alto contenido de ácidos grasos de cadena media, que son absorbidos directamente por el higado y quemados para proporcionar energía. Por lo tanto, para los deportistas puede ser una alta fuente de energía. A diferencia de otros aceites contiene exclusivamente ácido bútrico; un ácido graso de cadena corta, lo que contribuye a su sabor distintivo y a su fácil digestion.
En la cocina otorga un sabor delicado y delicioso a los platos y es un gran aliado para las cocciones a altas temperaturas ya que su punto de humeo, que no es más que la temperatura a partir de la cual cualquier tipo de grasa comienza a expulsar humo, puede llegar a los 250ºC, lo cual lo hace ideal para sofreír sin cambiar su sabor ni su composición química y con menos riesgo de generar acrilamida en los alimentos, una sustancia relacionada con la aparición del cáncer.
Entonces, el ghee puede ser un buen sustituto del aceite y la mantequilla para frituras, salteados o recetas de repostería. Además, como tiene un sabor más intenso y algo más tostado que la convencional puede ser utilizado de forma ocasional como ingrediente para untar en una tostada.
Se recomienda consumir entre 3 a 6 cucharaditas por día.
Ghee
Bollón de vidrio 300 gr.
Manteca sin sal.